La naturaleza vista desde el alcance de la limitación ocular es una forma conocida e identificable pero, ¿Qué pasa cuando entramos en el micro mundo de tejidos que le conforman?
Nos encontramos con minúsculos materiales orgánicos de colores y de texturas entretejidos. Desde un microscopio podemos apreciar su geometría, sus formas indefinidas; incomprendidas desde la estética tradicional pero no por eso fuera de lo bello y lo perfecto.
Es por ello que la artista Noemí Hernández se da a la tarea de plasmar como en un zoom microscópico estas visiones. Con el uso de materiales coloridos y suaves como lo son fomi, fibras textiles y papel; construye y conecta las impresiones que se imagina al observar su entorno natural; plasma imágenes de organismos y ecosistemas rescatando esas partículas, desde la fascinación que le causa el tejido, en un enramado que siempre une y fortalece pero que puede formar o deformar.